sábado

El primer día

Estaba en mi casa de campo, viajé precisamente para las fiestas de año nuevo. Dentro de las personas que estuvieron en casa, ese primer día del año, se encontraba el hijo de mi tía que tiene 8 años. Mi hermana menor estaba renegando y mi primo le dijo: que no renegara porque se pasaría el año así. Entonces, según la creencia de mi primo, yo me pasaría el año pensando en la chica de mis sueños.
Muchas veces las personas piensan que el primer día del año se repetirá en los siguientes 365 días, que si toman ese día pasaran el año embriagándose, o si se visten con ropa nueva, todo el año estarán bien vestidos. Pienso que cada día es diferente, que cada uno de nuestros actos puede generar situaciones diferentes.
Tal vez he sido muy radical al especificar y tomarlo al pie de la letra lo que ese día dijo mi primo de ocho años, es frase de: “no reniegues porque te pasarás así  todo el año”, si vemos desde un punto más amplio y general podemos ver que mi hermana si puede pasar el año renegando, por supuesto no todos los días, sino esto se verá reflejado en el balance que realicé ella en cada fin de año es muy probable, que ella llegue a la conclusión de que el año se paso renegando, por muchas razones.
Termino este pequeño razonamiento indicando que terminemos ya de estar dependiendo de supersticiones y hagamos que cada día sea el resultado del esfuerzo o de la manera cómo realizamos nuestros actividades para alcanzar determinados niveles de vida que nos toca vivir en cada situación social y política.

                                                                                                       JAYSON CHALCO