miércoles

Opinión - UNA HISTORIA PARA NO OLVIDAR, POR LA DESINFORMACIÓN

Las nuevas elecciones generales, me traen a la memoria aquel sábado 2 de octubre (un día antes de las elecciones 2010) cuando regresaba ya de noche a mi casa, y vi a una mujer llorar; estos hechos siempre me han puesto melancólica, y  más aún, viendo a una niña cuidando a otra.

Con mucha duda mi amiga y yo nos acercamos a ella, le pregunté por qué lloraba y si la podíamos ayudar, la verdad es que esperé una respuesta fría de alguien que no quiere nada, pero con desconsuelo y lágrimas en los ojos nos contó que le acaban de robar en el taxi, que se suponía le tenía que llevar a un hotel cercano desde el  paradero de Puerto Maldonado, ella acababa de llegar de allá para cumplir un derecho político, no quería pagar la multa, no contaba con los recursos necesarios para hacerlo.

Esta pequeña anécdota me hace pensar en la información que realmente recibimos en los procesos electorales sobre: hojas de vida de los candidatos, propuestas y de las sanciones que recibimos si no cumplimos aquello que se dice ser un derecho pero que finalmente se convierte en una obligación, nuestro VOTO.

Ruth, que es así como la llamaré a esta niña madre (18 años), no tenía por qué haber pasado por todo eso, además que le robaron, la amenazaron con llevarse a su niña de apenas un año y 2 meses de edad, acto que felizmente no pasó. Quién sabe que hubiera pasado realmente, no quiero ni imaginarlo; aquel desalmado chofer y su cómplice oculto en la parte trasera del tico se llevaron todo lo que poseía Ruth.

Ella no sabía que para las personas de escasos recursos económicos, la multa por no votar era el mínimo, pero ella se vino desde la profundidad de la selva de Puerto Maldonado, gastando más de lo debido, por qué tampoco sabía que podía hacer cambio de domicilio y así poder ahorrar el viaje.

El Perú está escaso de infraestructura necesaria en cuanto a comunicación, aunque el internet sea una fuente de información, se necesita que en lo más recóndito de nuestro país y en zonas rurales, donde no existe una apropiada infraestructura de comunicación, se dé una adecuada información y orientación. Así podríamos evitar este tipo de hechos, porque estoy segura que lo que le pasó a Ruth, le ha pasado a muchas personas.

Es tiempo que las instancias encargadas de todo el proceso electoral o inmersos en él, se organicen de mejor manera, informen de lo más importante y necesario a los ciudadanos electores.

Esperemos que en estas elecciones 2011, no sucedan peores crímenes y que la ciudadanía pueda tener más acceso a información necesaria para ejercer su derecho de VOTO.

1 comentario:

  1. Por eso el voto debe ser libre y mas aun informado, es una pena que Ruth haya sufrido eso, pero si solo votaran quienes estan consientes de esto seria mejor para ellos como para el pais.

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