El
año nuevo es una fiesta muy famosa y celebrada a nivel mundial, puesto que el
inicio del nuevo año, nos abre las puertas a una oportunidad más para convertir la vida, el
hogar y el trabajo en algo distinto. Porque
empezar un nuevo año como si fuera cualquier fecha, es una enorme
torpeza, un año de vida es un regalo demasiado grande para echarlo a perder, ¿alguna
vez has sentido ese deseo profundo y enorme de mejorar o de cambiar?.
Cualquiera
sea el método para realizar ese cambio espiritual en tu ser, no dejes que el
deseo se escape, porque no todos los días lo sentirás, si hoy sientes esa
llamada a querer ser otro, a ser diferente, atrápala con fuerza y hazla
realidad, el inicio de un nuevo año es el momento para reunir las fuerzas y
toda la ilusión para comenzar un mejor año, porque el que se proponga convertir
éste en su mejor año, lo puede lograr.
Sin
embargo no todos piensan así, en gran parte del mundo el año nuevo
es sinónimo de supersticiones y
cábalas para la buena suerte, puesto que se suele presagiar con muchos deseos, un año nuevo positivo para
sus vidas. Entre ellos tenemos las famosas doce uvas que según la tradición, se debe comer una uva por cada campanada del reloj, el
significado de este ritual se relaciona con las aspiraciones y anhelos de cada
persona y con el deseo expreso de que se conviertan en realidad. Otra de las
cábalas que se practica, es el uso de la ropa interior de color amarillo, las
medias, polos, etc. según la costumbre el amarillo representa el color de la
buena suerte, el punto es que no debe
ser comprada por uno mismo sino que la prenda debe ser regalada por un segundo o tercero.
El famoso baño floral que hacen las personas a la media noche,
esta cábala consiste en limpiar los
aspectos negativos de la persona y remplazarlo con un aura positivo en el nuevo
año que se viene; y por último la más
común, es dar una vuelta a la manzana,
con maletas en mano, según la costumbre se augura realizar un viaje al exterior, en un futuro cercano.
Cuantas sean las
supersticiones y cábalas para recibir el año nuevo, lo adecuado es mantener siempre la esperanza de superar o mejorar el pasado,
porque nos ofrece una brillante oportunidad para poder emprender todo aquello
que no lo pudimos hacer, de corregir todos los errores cometidos proponernos
nuevas metas y sueños.
JHOSIMAR HUAMAN